La terapia individual es un proceso en el que el terapeuta y el paciente buscan conjuntamente, en una relación estrecha, el origen de los problemas actuales del paciente, que generalmente hunden sus raíces en relaciones pasadas, en las que uno quedó atrapado y que ahora repite. Por un lado se buscan las escenas traumáticas, los vínculos dolorosos y por otro desvelar el proceso de cómo la persona ha ido intentando dar solución a eso, lo cual ha cristalizado en los síntomas actuales.
Hay una parte traumática en todo trastorno, y esa parte traumática proviene de la relación de la persona con su mundo, su familia, sus vínculos más cercanos y luego hay todo un proceso defensivo de ponerse máscaras, intentar soluciones que resultan fallidas y que van conformando la personalidad del individuo.
- Hay una parte traumática en todo trastorno
- las escenas traumáticas
- Es un encuentro afectivo
- Re-significar las experiencias
- Hay una parte traumática en todo trastorno
- Superar las dificultades emocionales y de relación
La terapia individual no es un encuentro para ser juzgado, por un terapeuta sabio, que te dice lo que tienes que hacer. Es un encuentro afectivo en el que poder conjuntamente, terapeuta y paciente, descubrir, desbloquear y finalmente cambiar. Pero el protagonista principal es la persona, el paciente. Su esfuerzo, su coraje y la capacidad de mirarse para dentro.El cambio implica re-significar las experiencias, es decir llegar a entenderlas y aprender de ellas, integrando nuevos significados según uno va conociendo qué partes puso, qué parte de su mundo psíquico le determinaron y por qué.
Mediante una terapia psicológica adecuada se pueden superar las dificultades emocionales y de relación. Conocer-se para también poder torear mejor las dificultades y no repetir estas maneras de relación disfuncionales.
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